ESTANCIA CRUZ E ICONO JMJ EN MENGÍBAR

JMJ MADRID 2.011
ARRAIGADOS Y EDIFICADOS EN CRISTO
FIRMES EN LA FE

Del 16 al 21 de Agosto se celebrará en Madrid la Jornada Mundial de la Juventud, con la presencia de Su Santidad Benedicto XVI, a la que se espera que acudan unos dos millones de jóvenes de todo el mundo.
            Por este motivo, la “Cruz de los Jóvenes” y el “Icono de la Virgen María” están recorriendo todo nuestro país, habiendo estado presentes en  la Diócesis de Jaén la semana del 30 de Mayo al 1 de Junio, y en Mengíbar el día 3 de Junio.
El lema de las jornadas de este año 2.011 es “Arraigados y Edificados en Cristo, Firmes en la Fe”, texto extraído de la Carta de San Pablo a los Colosenses (Col 2, 7).


UN 3 DE JUNIO PARA LA HISTORIA
El día 3 de Junio, cientos de feligreses de nuestro arciprestazgo, recibimos y acompañamos por las diferentes calles de nuestro pueblo, con gran entusiasmo y alegría a la “Cruz de la JMJ”, el “Icono de la Virgen María” y el “Icono del Santo Rostro”, en su peregrinación por la diócesis de Jaén. Fueron unas pocas horas, pero muy intensas y emotivas en este histórico día para las parroquias de nuestro pueblo y para todos los cristianos de Mengíbar y de los pueblos vecinos que nos acompañaron.
Pero antes, conozcamos mejor estos símbolos de nuestra fe:

         LA CRUZ:  
Es una gran cruz de madera de 3’8 metros de altura. Conocida como la “Cruz del Año Santo”, la “Cruz del Jubileo”, la “Cruz de la JMJ”, la “Cruz peregrina” o simplemente la “Cruz de los jóvenes”, porque fue entregada por el Beato Papa Juan Pablo II a los jóvenes, al final del Año Santo de 1984 después de cerrar la Puerta Santa, para que “la llevasen por todo el mundo, a todos los lugares y en todo tiempo”. Esta cruz estaba instalada, por deseo del Papa, cerca del altar mayor de la Basílica de San Pedro, “donde todos pudiesen verla, como símbolo de la fe”.
La cruz, como hemos podido comprobar, tiene una placa en la que aparece grabada en varios idiomas, la frase con la que Juan Pablo II entregó la cruz a los jóvenes: “Queridos jóvenes, al clausurar el Año Santo os confío el signo de este Año Jubilar: ¡la Cruz de Cristo! Llevadla por el mundo como signo del amor del Señor Jesús a la humanidad y anunciad a todos que sólo en Cristo muerto y resucitado hay salvación y redención” (Roma, 22 de abril de 1984).
Desde entonces ha viajado por todo el mundo y sigue haciéndolo. Además, está presente en todas las Jornadas Mundiales de la Juventud, que desde 1986 se vienen celebrando, y que este año tiene lugar en Madrid, el próximo, y cada vez más cercano, mes de agosto.
•Icono de María Salus Populi Romani:
Es una copia del icono que se custodia en la Basílica de Santa María la Mayor de Roma (la Basílica más antigua dedicada a la Virgen en Occidente). La imagen, que “auxilia con su materna mirada a todo al que a Ella recurre”, fue entregada a los jóvenes por el Beato Juan Pablo II en el año 2.003, durante su participación en la XVIII Jornada Mundial de la Juventud que tuvo lugar en Roma. Desde entonces acompaña a la Cruz en su recorrido por el mundo y en las JMJ como “signo de la pre­sencia ma­terna de María junto a los jó­venes, lla­mados, como el apóstol san Juan, a aco­gerla en su vida”.
Icono deL SANTO ROSTRO:
Es un precioso icono con la imagen del “Santo Rostro”, realizado por Inca Quesada, licenciada en Bellas Artes, por encargo de la Delegación de Juventud de la diócesis de Jaén, para que acompañara a los símbolos de las JMJ en su peregrinar por los pueblos de nuestra diócesis y en los actos y celebraciones que con este motivo se desarrollaran durante la semana que iban a estar en nuestra diócesis.
Preparación:
Para la preparación de este día, en el que nuestro pueblo fue el punto de referencia del arciprestazgo de Bailén-Mengíbar, fueron necesarias múltiples reuniones entre los párrocos y miembros de las comunidades de las distintas parroquias que lo componen para diseñar un programa de actos con motivo del “paso de la Cruz y los Iconos de la JMJ”.
Pero para que todo se desarrollara como había quedado establecido, se necesitaba una adecuada preparación y reparto de tareas. Por ello, en nuestra parroquia se celebraron reuniones en las que se establecieron los distintos cometidos que había que llevar a cabo: aparcamiento de vehículos, permisos, adorno y preparación del templo, adorno de la plaza, realización de pancartas y banderitas por parte de los niños de catequesis, ordenación de la entrada a la iglesia para la adoración de la cruz, preparación de las proyecciones, cantos y lecturas durante la misma….asignándose responsables de cada uno de estas actividades.
…Y llegó el día 3 de Junio…
La Cruz y los iconos fueron recibidos en la “Cruz Blanca” por gran cantidad de entusiasmados fieles de todas las edades, especialmente niños y jóvenes. Los miembros de la delegación de juventud que han llevado estos símbolos por toda la provincia, los bajaron de los vehículos que los transportaban y los dejaron en manos de los integrantes de la Asociación de Discapacitados “Abriendo Camino”, quienes, tras unas breves palabras de bienvenida por parte del arcipreste D. Antonio Garrido, realizaron la oración de la primera estación del vía crucis y los trasladaron hasta el lugar donde se ubicaba la siguiente estación.
Así sucesivamente, precedidos por las cofradías y acompañados de gran cantidad de personas, todas dispuestas a tocar o portar la cruz y los iconos, se fueron orando y recorriendo las distintas estaciones por parte de distintos grupos parroquiales (jóvenes de Cazalilla, niños de Jabalquinto, Cáritas de la Encarnación de Bailén,…), junto a los cantos de los coros que los acompañaban.
Al llegar a la VIª estación, asignada a la Parroquia de la Inmaculada, Nazareth David, Rubén y D. José Antonio realizaron la reflexión, peticiones y oración correspondiente, tras lo cual, los jóvenes y otros componentes de nuestra comunidad parroquial tomaron en sus manos la Cruz y los Iconos a la vez que cantaban “se nota, se siente, la cruz está presente” y los llevaron por gran parte de la calle Manuel de la Chica con una gran alegría, que sólo la Cruz es capaz de transmitir, hasta entregarlos al siguiente grupo parroquial.
Pero antes de esto, se produjo uno de los momentos más emocionantes de toda la tarde, cuando al paso de la Cruz, un niño de pocos meses de edad fue posado sobre la misma durante unos instantes (hecho que se repitió después con otros dos bebés a la salida de la Parroquia de la Inmaculada).
En la Parroquia de San Pedro, se produjo un emotivo encuentro de la Cruz con los enfermos allí congregados. Tras el rezo de la XIª estación dentro del templo, la Cruz fue recorriéndolo, pasando delante de estas personas que encontrarían en ella el alivio y la fuerza para seguir llevando cada uno “su propia cruz”.
La llegada a la Plaza de la Inmaculada fue impresionante: se encontraba llena de personas entre las que destacaban las múltiples camisetas rojas de los niños y jóvenes de catequesis de nuestra parroquia, con la imagen del Santo Rostro de la JMJ en Jaén, agitando sus banderitas con el logotipo de la JMJ de Madrid 2.011 que ellos mismos habían realizado con la ayuda de sus catequistas. Mientras los Iconos eran introducidos en la Iglesia, la Cruz fue colocada sobre el escenario. Allí, jóvenes del grupo de teatro Getsemaní, interpretaron un mimo en el que una joven asediada por el alcohol, la droga,…sólo encontraba la salida gracias al apoyo de Cristo. Posteriormente la Cruz fue llevada hasta el interior del templo y colocada delante del altar, flanqueada por los dos Iconos, para llevarse a cabo el acto más importante del día, la “Adoración a la Cruz”.
En el interior de la iglesia, que se encontraba vacía, sin bancos, se habían dispuesto telas que formaban en los laterales, un  pasillo de entrada, en el que se proyectaban imágenes de La Pasión y de “cruces” actuales, y otro de salida, con las letras de las canciones. El espacio central, frente a la Cruz y los Iconos, quedaba dispuesto para aquellas personas que tras pasar por la cruz quisieran tener un momento de oración ante ellos. Fueron cientos de fieles los que durante una hora, pasaron en silencio y recogimiento ante la Cruz y los Iconos, mientras se alternaban los cánticos con las lecturas de textos de la Sagrada Escritura y de los Papas Juan Pablo II y Benedicto XVI. Una buena parte de ellos se quedaba en el centro, sentados en el suelo, en recogimiento y oración.
Una vez terminado el acto, estos símbolos de la JMJ fueron llevados hasta la plaza entre muestras de júbilo (suelta de globos y pétalos, cánticos,…), llevándose a cabo por parte de los sacerdotes presentes la XVª estación: ¡Cristo ha resucitado!. Desde aquí se inició el recorrido hasta el Paseo de España, con una gran algarabía, palmas, canciones,..…mientras la Cruz y los Iconos iban siendo portados por los brazos de decenas de jóvenes, y rodeados de gran cantidad de personas que se acercaban especialmente a la Cruz para simplemente tocarla o portarla durante un pequeño pero muy intenso trayecto, siendo fieles a las palabras que pronunció el Beato Papa Juan Pablo II el 31 de marzo de 1.996: “Abrazar en este día la Cruz, pasarla de mano en mano, constituye un gesto muy elocuente. Es como si dijéramos: Señor, no queremos estar contigo sólo en el momento del ‘Hosanna’; pero, con tu ayuda, queremos acompañarte en el Vía Crucis como lo hizo María, Madre tuya y nuestra, y el apóstol San Juan” .
Al final de la Calle General Reding esperaba el Sr. Obispo de Jaén, D. Ramón del Hoyo, que se incorporó al recorrido hasta su despedida en el Paseo de España.
En definitiva, todo el paso de la Cruz y los Iconos por las calles de nuestro pueblo, pero especialmente desde su salida de la Plaza de la Inmaculada hasta su llegada al Paseo de España, se vivió con una gran alegría, como una auténtica
 “FIESTA DE LA FE”.
Confiemos en que su estancia entre nosotros, sirvan para enraizar y hacer más fuerte nuestra fe, especialmente en los jóvenes y que éstos se animen y acudan a Madrid para vivir con cientos de miles de cristianos junto al Papa Benedicto XVI, esta próxima Jornada Mundial de la Juventud. Igualmente animar a nuestra comunidad parroquial a acoger a los jóvenes que vengan a nuestra diócesis en los días previos a estas jornadas.

Finalmente, gracias a todos aquellos componentes de la comunidad parroquial de la Inmaculada que han participado en la preparación y organización de este evento: desde aquellos que dedicaron muchas horas al arreglo y preparación del templo y de la plaza, a los que tuvieron que permanecer entreteniendo a los niños, organizando los aparcamientos o preparando las lecturas y la proyección de imágenes mientras la Cruz discurría ya por las calles de  nuestro pueblo, u ordenando y controlando la entrada y salida de la iglesia durante la “Adoración a la Cruz”, etc, etc. En definitiva, se ha vuelto a demostrar que en nuestra parroquia, como decía el lema del 25 aniversario, “SEGUIMOS HACIENDO COMUNIDAD”.

ALBUM FOTOGRÁFICO


VIDEO  CALLE  GRAL  REDING